No vamos a hacer un post superlargo explicando las excelencias de XIX KEBAB, más que nada porque ya escribimos sobre él hace mucho, en una galaxia bloggera muy, muy lejana...
Para la familia Bagel es un clásico que no necesita más presentación ni más preámbulo. Es EL restaurante sirio al que hay que ir si se quiere triunfar de verdad: auténtico, sin impostura, sin franquicia, de toda la vida y como tal, muy kitsch.
Hace muchos años que abrió sus puertas, y desde entonces no ha dejado de satisfacer a clientes que han ido buscando comida de calidad. Sin desmerecer a opciones como Ugarit o Amrit (donde se come razonablemente bien), XIX KEBAB juega otra liga. Les emplazo a que lo conozcan, y aunque lo que van a ver aquí ya deben conocerlo porque son platos más que conocidos, su manera de hacerlos marca la diferencia.
Salsas, carnes, cuscús...son de otra galaxia. Y lo mejor, a precios más que razonables, que es lo que interesa también.
En una de estas recientes visitas, el menú se compuso de:
Variado de entrantes, con Mohamara, Hummus, Babaganush. Esto es BÁSICO. Al fondo unos Arayes de queso espectaculares (pita con queso, feta diría, calientes).
Taboulé del bueno, con su perejil y su menta decorativa en ración generosa. Debajo, una ensalada en recipiente comible que siempre es resultona y de la que nunca recuerdo el nombre exacto...
Cuscús de pollo mitiquísimo. Brutal, un placer de los de verdad y que dudo pueda encontrar comparación posible a este lado del Nilo. **(Acabo el post aquí porque Blogger ha tenido a bien fastidarme bastante no dejándome escribir debajo de la foto, así que finalizo diciendo que no se olviden de los Baklava y del Té con menta, que son dos imprescindibles en el local).
Viva Siria libre.
Viva Siria libre.
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